Pascuales 1



ALEGRARNOS EN LA PASCUA es quitarnos el miedo que es la causa fundamental por la que tenemos cerradas las puertas de nuestro corazón. Dios nos busca siempre, aun en nuestro miedo, y para darnos coraje nos muestra la herida de su costado y las llagas de sus manos, es decir, nos hace ver y tocar que el Resucitado es el Crucificado, que es en la cruz donde está la luz, que la vida surge desde la muerte. Este es el descubrimiento más radical y la causa de la verdadera alegría.

ALEGRARNOS EN LA PASCUA es escuchar “la Paz esté con vosotros”, y acto seguido, la investidura “Recibid el Espíritu Santo” y la autoridad que va pareja “a quienes perdonéis los pecados les quedan perdonados”, es decir, tenemos la capacidad de sanar si acogemos al Espíritu Santo, pues es Él quien sana por nuestro medio.

ALEGRARNOS EN LA PASCUA es aceptar la nueva revelación que se nos da, aunque tengamos las puertas cerradas, porque es Él quien nos busca, más que nosotros a Él. El Resucitado nos dice que si queremos huir del cáncer de nuestro egoísmo y de la duda, debemos meter las manos en las heridas de los hombres y mujeres, acercarnos al sufrimiento humano y no huir de las tinieblas del mundo, luchar contra el mal en todas sus manifestaciones y descubrir que merece la pena confiar.

ALEGRARNOS EN LA PASCUA significa cuántos costados heridos y manos llagadas hemos visto últimamente y cual ha sido nuestra reacción ante ellos.

ALEGRARNOS EN LA PASCUA es cantar el ¡ALELUYA! con el corazón y con las manos.
                                        Félix Ramos Lores, c.p.
 


                                      
 
¡Feliz Pascua de Resurrección!
Parroquia Santa María Goretti